Se escucha continuamente de los adolescentes que cursan la escuela secundaria razones muy fundadas de que la matemática no sirve para nada, que no les gusta y que es una perdida de tiempo.
Y en realidad, ¿a quien le puede llegar a gustar matemática como esta enseñada en la escuela secundaria?
Supongamos por un instante que pudiéramos viajar a través del espacio y llegar a un lugar muy distante, donde existiesen seres que jamás tuvieron contacto alguno con nuestra cultura, imaginemos entonces que en contacto con ellos quisiéramos de alguna manera explicarles y enseñarles lo que es la música... linda tarea, no cree?
Bien, en esta situación, y no por menos preciar a nadie, ¿qué pasaría si le hacemos escuchar el chingui chingui de la cumbia villera, o el sucundun sucundun de los que cantan bajo la ducha escuchando la radio de fondo?
Le digo lo que pasaría, FRACASARÍAMOS! Y con mucha razón!
No podemos pretender transmitir la belleza de la música por medio de un lugar donde no está.
Lo que los jóvenes ESCUCHAN Y DESCUBREN POR LO QUE SE LE MUESTRA de la matemática es feo, aburrido y no les gusta.... y tienen razón, pero ... debo decir que lo que se le muestra no es la matemática y lamentablemente está muy lejos de serlo.